Una cosa defendiendo, otra atacando

Adalberto González en disputa del balón con el capitán aurinegro 

Juan Aguilar./ Foto Sportivo San Lorenzo.

El Rayadito volvió a sufrir otra derrota en el Torneo Apertura. En un encuentro que al final se puso “infartante”, el Santo cayó 3-4 ante Guaraní y ahora no solo está último en los promedios, sino que es el único colero del campeonato con tan solo un punto.

No le encuentra la vuelta. San Lorenzo reaccionó muy tarde en el compromiso y sufrió las consecuencias de un primer tiempo repleto de desatenciones, con un déficit que volvió a demostrar en este juego, en este caso la facilidad con la que le hacen los goles.

El primer tiempo se jugó bajo una intensa lluvia en Itauguá, que impidió que los equipos mostraran lo mejor de sí, más allá de que Guaraní puso en cancha un equipo alternativo para dar descanso a aquellos jugadores que serán titulares ante Rácing de Avellaneda por Copa Libertadores esta semana.

San Lorenzo parecía haber quedado hecho pedazos, ante un equipo de Guaraní al que parecía serle todo tan fácil y esto se debió a las inofensivas reacciones de los defensores del Santo en complicidad con algunos errores del portero Víctor López.

El primer tanto de Guaraní llegó a los 9’ PT con gol de Rubén Maldonado. La jugada se originó con un centro de Juan Patiño que rechazó Víctor López con un puñetazo, pero al intentar volver a su arco resbaló y fue ahí que llegó el remate del zaguero Maldonado desde la medialuna del área para poner el 1-0 parcial.

El Rayadito tuvo la posibilidad de empatar en dos ocasiones. La primera en una mano a mano en el que Sergio Órteman quedó ante el arquero Antonio Franco, pero el ángulo se le cerró bastante y no pudo definir bien; la otra en un tiro libre ejecutado por Elvio Amarilla que cabeceó Adalberto González y pasó muy cerca del travesaño del arco de Guaraní.

Luego Rodrigo Bogarín aumentó al marcador para el “Aborigen” de una forma “chistosa”. Sin la presión de los zagueros del Rayadito, Armindo Ruíz Díaz intentó su gol rematando al arco, pero la trayectoria del esférico que pegó en el delantero Bogarín que acompañó la jugada cambió, engañando totalmente la visualización de López.

A los 42’ PT la victoria aurinegra ya se convertía en una goleada. Tras un córner corto Darío Ocampo se metió en el área eludiendo al juvenil Carlos Pereira y le cedió un pase a Adilson Lezcano, que se acomodó y definió sin dificultades para el 3-0.

La lluvia, el resultado y el momento eran los peores enemigos para el Rayadito que prácticamente quedaba fulminado. Aunque un minuto antes de culminar ese primer tiempo San Lorenzo tuvo un rayito de esperanza para replantear el juego para la complementaria. En un tiro libre de Gerardo Arévalos donde la pelota pegó en la barrera, pero rebotó dentro del área de Guaraní, donde Miller Mareco se acomodó y puso un centro perfecto para la llegada de Adalberto González, que descontaba para el Rayadito poniendo el 1-3 parcial. Tercer gol para Adalberto en el torneo.

Humberto Ovelar no hizo cambios para el segundo tiempo y la lluvia ya desapareció, con un San Lorenzo que recuperaba la confianza y Guaraní que ya se cerraba atrás, parecía poner el juego más interesante de lo pensado. 

Miller Mareco era el arma fundamental para San Lorenzo. Era él quien empujaba al equipo, junto a Órteman y Pereira fueron de lo mejor en el equipo del “Loro” e intentaban demostrar que no estaba todo perdido, con la voluntariosa labor de sus delanteros Adalberto González y Gerardo Arévalos.

Adalberto tuvo la chance de descontar en un pase genial de Orteman, pero sacó un defensor; tampoco Pereira pudo aprovechar el rebote y luego Orteman de fuera del área terminó definiendo por arriba. Fue la oportunidad de ponerse a tiro de empate.

A los 19’ ST se produjo el cuarto gol de Guaraní en una falla de los marcadores, donde Orteman le pasó muy despacio el balón a Héctor Sosa quien tuvo que extremar recursos en despejarlo, pero Darío Ocampo le robó el esférico y gracias al “hueco” que dejó Sosa en defensa aprovechó para ponerlo a Juan Aguilar frente al arco y  éste definió ante la salida de López, al que la pelota le pasó entre las piernas.

Ahí sí que parecía estar todo liquidado a favor de Guaraní. Pero luego de tanto buscar el Rayadito consiguió descontar a los 26’ ST, tras un tiro libre ejecutado por Tomás Guzmán quien acababa de ingresar al campo de juego y el mal rechazo del portero Franco, le quedó la pelota a Gerardo Arévalos y la convirtió en gol. Luego cerca de los 30’ ST se produjo una jugada llamativa en el área de Guaraní, donde dio la sensación de que Edgar Aranda le comete penal a Guzmán, tras otra aproximación del Santo.

A los 37’ ST Tomás Guzmán con un soberbio remate de tiro libre convirtió el tercer gol para el Rayadito que seguía más vivo que nunca en el partido; verdadero golazo para un jugador que fue de vital importancia para esa recuperación futbolística.

Sobre el final del encuentro San Lorenzo tuvo dos jugadas claritas donde pudo haber igualado el encuentro o hasta inclusive ganarlo; primero fue Javier González dentro del área y luego una de Guzmán que definió y Franco se lanzó y despejó la pelota al córner.

El juego finalizó 4-3 a favor de Guaraní. San Lorenzo le ocasionó más problemas de lo previsto al rival, que llegó a estar en dos ocasiones con una ventaja de tres goles y que corrió con mayor fortuna en ese primer tiempo bajo agua.

Hay una notable diferencia en los dos sectores del equipo Rayadito; el sector defensivo y el sector ofensivo. Por más que en la tabla el Santo figure como el peor del campeonato, el equipo sigue demostrando cosas interesantes y a los rivales que le ganaron no les fue nada fácil. 

Es un equipo que necesita ser “pulido”. Se habló en la semana de que si el Santo perdía ante Guaraní el “Loro” Ovelar dejaría de ser el DT. Pero ante esta actitud del equipo, demuestra que la mano del entrenador se nota y más con los cambios que resultaron, como el ingreso de Guzmán.

Ahora, los resultados favorables siguen sin aparecer y cuando eso se da muy continuamente es difícil que la presión hacia el entrenador no aparezca.

El partido del miércoles ante Olimpia va a ser la oportunidad para que el equipo demuestre para lo que realmente está. A ver si de una vez la actitud y el resultado positivo se combinan, de lo contrario se continuará  hablando de la salida del DT, juegue o no juegue bien el equipo.