No hay dónde cimentar una ilusión

San Lorenzo sigue atascado, al no pasar del empate frente a River. A falta de muy poco para que concluya el torneo, el promedio está que arde y el equipo no muestra síntomas de poder mejorar la situación delicada que atraviesa en lo deportivo. Parece un destino marcado para la Intermedia.

No consiguió hacerse fuerte de local. / APF.

Un partido que no merece un análisis. No lo vale. No hay nada que rescatar, sí que reprochar. Porque San Lorenzo demostró una vez más ser un equipo endeble. Sin amor propio, sin ambición, pareciera que no pasa nada, cuando en juego está nada más y nada menos que la permanencia en Primera División, categoría a la que tanto trabajo le costó a esta institución alcanzar.

El Rayadito fue superado en actitud durante todo el partido. No generó absolutamente nada, y de no ser por el excelente guardameta que tiene, era una derrota cantada contra el Kelito. No hay una fuerza que permita alimentar la ilusión de lograr asegurar la participación en la máxima categoría del futbol paraguayo. 

La dupla técnica Martínez-Cano cumplió su sexto partido al frente de la conducción del Santo, empatando tres de ellos y perdiendo otros tres. Se vio una mejoría en jornadas atrás, cuando estuvo muy cerca de ganar partidos impensados, sobre todo frente a Guaraní... pero después este equipo fue siempre aplastado desde lo táctico y anímico. 

Se viene usando lo mejor de lo poco que hay, porque el plantel es corto y hay puestos claves donde se escasean jugadores y hubo que suplir con otros cumpliendo funciones ajenas. 

Con estas herramientas habrá que pelear lo que queda del Apertura e intentar alcanzar un puntaje más esperanzador. Hasta aquí solo se ha sumado 10 unidades, quedando 18 en disputa, tres rivales directos (Luqueño, Guaireña y Gral. Díaz), un equipo irregular (Sol) y dos campeonables (Cerro y Libertad). ¿Cuántos puntos habrá que sumar para pelear con aspiraciones el Clausura?

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