Como es sabido, cada agosto celebramos las patronales y aniversario de San Lorenzo, a estos efectos, la institución municipal organiza varias actividades a lo largo del mes y suma a su programa otros eventos ajenos a la institución.
A comparación de otros años, no podemos decir que en esta ocasión tuvimos una agenda más nutrida y creativa. No, “siempre lo mismo”, parecería ser que a los integrantes de la comisión de festejos patronales y aniversario no les importara mucho realizar algún esfuerzo en lograr un festejo más atractivo y entretenido.
No está demás traer sobre texto algunos comentarios que nos han acercado hasta nuestra mesa de trabajo. “Ahí dos o tres personas no mas luego hacen lo que quieren, el resto no existimos. Y otro tema, no quieren gastar en estas cosas”.
Es oportuno mencionar las declaraciones del Concejal Eugenio “Neneco” Garcete (ANR), que con gran acierto criticó a los organizadores por la nula apertura y participación de los barrios. Aseguro de que hay dentro de los integrantes “un grupo cerrado” que no permite la cooperación, incluso la de aceptar propuestas.
Esto tal vez explica mucho porque por lo general tenemos unos festejos pobres y excluyentes.
De hecho cada año las críticas aumentan, pero por lo visto no les interesa, por ello no se toman en cuenta las sugerencias que desde todo punto de vista son justificadas.
Y algo que preocupa, es notable la manera como se va diluyendo en todos los sectores “aquel sentido de pertenencia”. Al tiempo de reflejarse una disminución de los ciudadanos en las actividades culturales y de entretenimiento. De la misma manera en lo comercial, tal es así que este año hubo una menor cantidad de puestos de comida rápida los días nueve (9) y 10 de agosto en las adyacencias de la Catedral.
Sin bien son varios los aspectos que merecen una atención adecuada en la organización de estos 239 años de festejo fundacional. El tema que hoy nos ocupa nos obliga a puntualizar un resultado extremadamente inmerecido. Puesto que San Lorenzo del Campo Grande no solamente es la zona céntrica, va mucho más allá con sus historias, su gente, en fin.
San Lorenzo cuenta con más 50 barrios, ninguno de ellos fueron protagonistas en los festejos, ni siquiera los nuevos que están hoy incluidos en nuestro mapa político tras la promulgación del proyecto que fija los límites. En el cual se han incluido unas 160 hectáreas, donde hoy los nuevos barrios Anahí I y II, Villa Conavi y la zona del Cuartel de la Victoria; han pasado totalmente desapercibidos.
Es lamentable que los integrantes de dicha comisión ignoren a los barrios.
Queda en manos de los aludidos la responsabilidad de corregir tan grosero error.
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