Otra puñalada a la ilusión

   

        Debut con derrota de Pablo Caballero.

[Análisis y Opinión] El Rayadito volvió a defraudar a su público. En la tarde de ayer cayó 1-2 ante Santaní, en el estreno de Pablo Caballero como DT, pero éste no tuvo su mejor debut, ante la falta de actitud futbolística de sus dirigidos.

Por Sergio Velázquez 

San Lorenzo tuvo un partido para el olvido ante Santaní. Fue una de sus peores actuaciones en el presente torneo y lo que produjo más fastidio fue la falta de actitud de la mayoría de los jugadores, que no plasmaron para nada en el campo de juego la intención de empezar a levantar cabeza.

Nacía la nueva ilusión con la llegada del estratega Pablo Caballero, pero tal ilusión sufrió una puñalada. No queremos creer que esta es o será la nueva versión del Rayadito, que se juega la permanencia apostando a un entrenador motivador, que llegó para cambiar definitivamente el rumbo.

Ojo, no solo se refleja dentro de lo negativo esa marcada falta de actitud. Caballero también se equivocó en la lectura del partido. Hubo cambios inentendibles y no se animó a reemplazar a Sergio Órteman, quien fue el peor jugador del Rayadito en el juego de ayer. 

Aparentemente el nuevo DT aún no tiene un conocimiento profundo de su plantel, lo cual es entendible pero a la vez urgente. Se sigue perdiendo puntos y ante rivales directos, mientras las fechas van pasando, donde ya superamos la mitad del campeonato.

Analizando el juego en sí, Santaní lo liquidó prácticamente en el primer tiempo, donde San Lorenzo era quien tenía que proponer el juego. Sin embargo el local parecía estar nervioso con pases imprecisos por doquier, ante un Santaní que fue mucho más ordenado y pícaro en las pocas llegadas claras que tuvo frente al arco defendido por Sergio Valinotti.

El primero para Santaní llegó a los 25’ PT a través del experimentado delantero brasileño Rodrigo Teixeira, quien prácticamente cabeceó sin la necesidad de saltar, ya que entró con tanta soledad en el área sanlorenzana. 

       

Diez minutos más tarde, en un error grosero en defensa José Ríos pierde el balón y con ese contragolpe el goleador santaniano Wilson Leiva dijo presente y puso el segundo.

A esa altura Caballero lo sacó al chico Hugo López, cuando ya estaba acomodándose mejor en el equipo y en su lugar ingresó Osvaldo Hobecker. Sin embargo el que más flojo se mostró fue Órteman, pero para Caballero aparentemente fue más fácil sacarlo a un chico, como comúnmente lo hace la mayoría de los entrenadores.

En la complementaria el equipo de San Lorenzo no mejoró, continuó con esa desprolijidad y la posibilidad de empatar o revertir el marcador seguía viéndose difícil.

Caballero completó sus modificaciones, donde hizo ingresar a Marcos Cabañas y a Tomás Guzmán, en reemplazo de Gerardo Arévalos  y José Ríos respectivamente. Estos dos últimos también de floja actuación.

A los 21’ ST San Lorenzo se quedó con un jugador menos. Adalberto González recibió su segunda amarilla y fue expulsado, completando de manera personal una tarde horrible, ya que su colaboración con el equipo no fue fructífera.

El Rayadito consiguió descontar a través de José Barreto, donde por fin se pudo aprovechar un córner. Ese gol llegó a los 31’ ST y de alguna manera, la chance de poder empatar se hizo más cercana y el ánimo creció a medias. San Lorenzo intentó ser más punzante en ofensiva y tuvo ocasiones importantes, pero la ausencia de un goleador (Adalberto y Arévalos ya no estaban) era muy notable. Hasta que finalmente el árbitro Carlos Amarilla dio el pitazo final.

Las realidades entre los equipos recién ascendidos continúan siendo muy distintas. Qué envidia, sana quizás, de parte de San Lorenzo hacia Santaní, quien ha sumado hasta aquí 18 puntos, arrancando una segunda rueda con el pie derecho.